Lore
Distintivo Duelista Opulento
"He visto el final de todas las cosas. El novenario, la reina insomne, el extraño y triste hombrecillo en su barca destartalada. Todos creen haber visto lo mismo. Lo que ignoran los destruirá". (Emperador Calus)
MCXLII-II, en el futuro.
Registrada por el subescriba Shipal
Así asesinó tiernamente el emperador jubiloso a su querida Sombra de la Tierra.
Y, cuando llegó el final de todas las cosas, solo quedaron el emperador Calus y la Sombra de la Tierra en el ojo del huracán que era la nada. Los neutrinos que quedaban en la fase horaria podían abarcarse con una mano humana.
Entonces, la Sombra de la Tierra se arrodilló ante el emperador y, con gran valentía, amor y dignidad, le dijo "Mi bondadoso y generoso anfitrión, el momento que tanto ansiabas ha llegado. Permíteme concederte tu último y más puro deseo".
El emperador Calus, con lágrimas en los ojos, pronunció las últimas palabras que jamás le diría un ser vivo a otro: "Esto te lo concedo yo". +
Y nuestro compasivo emperador mató a la Sombra de Sombras, la Cría de Lobo, el Asesino de Oryx, la Sombra de la Tierra.
Así, el emperador se reservó el derecho de ser el último. Y, cuando el final llegó, lo aceptó con el cadáver de la Sombra entre sus brazos y el estómago retumbando con una risa de júbilo.
+ Dado que no habrá ningún escriba cuando llegue este momento, el último consultará con el emperador Calus los comentarios que piense pronunciar. Hay que borrar esta nota en el momento más próximo a la actualización de la historia.