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Ecos de gloria
El objeto de clase de este set contará como si llevaras {var:1637760185} piezas.
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Lore
Distintivo Filo Independiente
Muestra tus verdaderas intenciones.
"¡Saludos, unidad San! ¡Tengo varias consultas relacionadas con lo acontecido durante mi reciente periodo de aislamiento!".
San-14 asintió en dirección al terminal de Failsafe en el CLME, que parpadeaba con emoción mientras la IA hablaba.
"Sí, claro", respondió San. "La lucha contra el Testigo nos llevó a muchos sitios curiosos, y forjamos alianzas extrañas".
El exo cogió una silla para sentarse junto a Failsafe. Cerró los puños y los levantó en un gesto de triunfo.
"El portal hacia el Viajero fue nuestro primer gran obstáculo. No sabíamos cómo cruzarlo ni lo que el Testigo estaba haciendo. Perdimos a muchos guardianes… y civiles".
Hubo un momento de silencio por las vidas que se sacrificaron persiguiendo al Testigo.
"No sabíamos cómo actuar", prosiguió San. "Pero la subcomandante Sloane volvió con nosotros y dijo que había un ser que podía contarnos más cosas. Con grandes esfuerzos y tras recorrer las profundidades de Titán, logramos hablar con aquel ser".
Failsafe emitió una serie de pitidos agudos. "¡Sí! En aquella época, los guardianes frecuentaban Nessus".
"Para pescar", añadió San-14 una vez interrumpida su narración. "Pero aquel ser, aquel protogusano, Ahsa…".
"Entonces, ¿hay peces? ¿En el lago? ¿En el lago de radiolaria?".
El exo suspiró, sacudió la cabeza y continuó.
"Sí. Bueno, pues Ahsa nos dirigió hacia Savathûn, que sabía cómo cruzar el portal. Por supuesto, en aquel momento, estaba muerta. Pero Immaru, su Espectro, acudió a nosotros y nos dijo que antes debíamos eliminar a Xivu Arath. Solo entonces la resucitaría".
"¿Cuántos peces?", preguntó la IA apresuradamente.
"Eh… Pues… no lo sé", respondió él. "¿Muchos?".
Carraspeó. Frustrado, el exo se tocó la rodilla con los dedos.
"El caso es que entonces fue cuando decidimos recurrir a Eris e Ikora, que conocían a la colmena y a Savathûn mejor que cualquiera de nosotros. Eris llevó a cabo un ritual… ¡para transformarse en una diosa de la colmena!".
El exo saltó con los puños en alto dando un empujón a la silla, cuyas patas arañaron el suelo del CLME con gran estrépito. Después de una pausa, miró a su alrededor, se aclaró la garganta y volvió a sentarse. Acto seguido, levantó un dedo.
"Y luego…".
"¿Podría alguien traerme un pez? ¿Y una pecera?".
Incrédulo, San pestañeó e hizo una pausa.
"Tal vez podamos encargárselo a alguien", dijo San impacientemente. "Xivu Arath…".
"¡He redactado una lista de posibles nombres para un pez!".
"Eso está… genial, Failsafe. Vale, entonces, ¡Eris desterró a Xivu Arath y Savathûn resucitó! Nos dio lo que le pedimos: ¡una forma de cruzar el portal! Pero tuvimos que hacer un pacto con Riven, la gran Ahamkara de la Ciudad Onírica, y…".
"¿Podemos volver al tema de la pesca?", preguntó Failsafe con desenfado cortando a San, que, exasperado, se echó las manos a la cara.
