Exotic Perks
Doble o nada
Stats
Defensa | 0 |
Curated Roll
Lore
Equilibrio de Poder
"En mi mente lo he oído susurrar: 'Ven a verlo'".
Maya Sundaresh se inclina sobre el monitor, la única fuente de luz en un despacho a oscuras. La pantalla muestra los escáneres cerebrales de 16 exos. "¿Cómo está el doctor Ardehi?", pregunta acercándose al micrófono.
"Muerto". La voz de Chioma Esi es apenas un suspiro ronco.
Maya activa la cámara de seguridad de Contención del Velo y ve a su mujer, arrodillada en la pasarela sobre el cuerpo del doctor Ardehi. En las barandillas de los laterales, se extiende una procesión de exos muertos. Maya abre un gráfico de barras para estudiarlo.
"Los informes de neuropatías indican un pico en la actividad del córtex prefrontal y el hipocampo momentos antes de sufrir la muerte cerebral". Chioma deja escapar un suspiro al oír las palabras de Maya antes de continuar con el análisis. "Los picos se estabilizaron durante un quinto de segundo, lo que podría deberse a un error en el receptor. Quizá necesitemos usar un intermediario en lugar de conexiones directas. ¿Los cables están dañados?".
Maya vuelve a abrir las imágenes de seguridad y ve a Chioma enjugarse las lágrimas y revisar un cable grueso conectado a la parte posterior de la cabeza de uno de los exos muertos. "No lo parece. Los interruptores de capacitancia no se han activado. Este…". Hace una pausa y traga saliva. "Este hardware no es nuestro problema…".
"Es el suyo", susurra de forma perceptible solo para Maya.
"Es el suyo", concuerda Maya.
Chioma hace acopio de valor para admitir: "Creo que… deberíamos parar. Reevaluar nuestros descubrimientos, retomar el análisis de la anomalía electromagnética inicial antes de establecer contacto. No podemos…".
"¿Seguir echando leña al fuego?", ataja Maya mientras se reclina en el asiento. Chioma está demasiado desconcertada por su indiferencia ante la muerte como para añadir nada. "Tienes razón", continúa Maya. "Pero no vamos a parar, sino a reorientar el proyecto. El Velo es el futuro de la humanidad".
Por un momento, ninguna de las dos se pronuncia. El tenue zumbido de los aparatos electrónicos en la oscura habitación es lo único que despierta los sentidos de Maya. Eso, y el siseo estático que no logra sacarse de la cabeza.
"El Velo es peligroso", afirma Chioma; su tono tiembla con cierta emoción. El miedo a perder a la mujer que ama le impide seguir presionando desde el borde del precipicio moral sobre el que ahora se encuentran.
"Lo es".
"Lo es", corrobora Maya en voz alta. "Debemos abordarlo con cautela, respeto y, sobre todo…, reverencia". Se cristaliza un pensamiento. "Debemos tratarlo como un cuchillo".