Lore
Máscara Apocalipsis Ancestral
“Puede ser que dejes tu primer apocalipsis. Pero el segundo siempre te acompañará”. (El Vagabundo)
Costa Esmeralda. Zona Muerta Europea.
Hipernaves de guardianes rugían en los cielos. El Vagabundo caminó por la orilla, pasado el naufragio cabal de escudos y armaduras. Las Luces de la Torre se habían tomado muy bien su pequeño juego.
Tomó un enorme cañón de mano y su Espectro zumbaba alrededor de su cabeza como una mosca. Su Luz estaba roja como un ojo vex. El Vagabundo escudriñaba el campo de batalla mientras andaba, tomando nota de las armas y piezas que le pediría a la IA del Desahucio que teletransportase al Hangar. La playa estaba llena de tecnología cabal chamuscada. El Vagabundo encontraría un uso para todas esas cosas. Mantenimiento de rutina del Desahucio. Bancos adicionales.
El Vagabundo cree que si juntara dos escudos cabal, podría construir una pequeña choza para protegerse del sol y echar una siesta.
Pasó junto a un legionario que se arrastraba hacia un fusil de postas descartado y le disparó en la cabeza. El ladrido de su cañón retumbó por la playa.
Esto de Gambito iba tan bien que pronto tendría los recursos para añadir más campos de batalla.
Pasó junto a un psiónico agachado que toqueteaba la radio de un coloso muerto.
Una ráfaga del cañón del Vagabundo envió al canijo cabal por los aires y su cabeza se evaporó en un soplo violeta.
El Vagabundo continuó su paseo, preparando el campo para la llegada del Desahucio. El único sonido en kilómetros a la redonda era el ocasional ladrido de su cañón.