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Lore
Guanteletes "Caminante de represa" de la ANP
[DÍA 3] El espectro de Titán sigue caminando por los mares sin sol, murió hace tiempo.
INTEGRIDAD DE RED DE REPULSIÓN... NOMINAL
TAMIZ DE OXÍGENO... NOMINAL
PROFUNDIDAD... 106 m
Las letras del HUD de Sloane se hicieron más nítidas. Movió una mano en el fluido de metano hacia su placa frontal, como si intentara distraídamente restregarse el sueño de los ojos.
El movimiento en la oscuridad que rodeaba formaba nubes de arenilla.
Las luces de su casco parpadearon cuando sus dedos tintinearon contra él. Un lacayo apareció bramando hacia el haz de luz, y le salían burbujas de la mandíbula. Sloane abrió bien los ojos y sin pensar lanzó al lacayo sobre sus hombros y le hundió la mandíbula en el cráneo. Su traje potente le daba estimulantes de forma reactiva.
Se giró y agarró la espada de un caballero a mitad de su ataque, partió la hoja en dos entre los dedos de su guantelete y hundió un fragmento en el pecho del enemigo. Otro lacayo apareció ante sus luces justo para recibir una pincelada plateada y sibilante en la garganta. Sloane vio a un grupo en su visor, más de treinta combatientes muertos de la colmena resaltados, que se deterioraban despacio en pequeños destellos hirvientes y estrepitosos que enviaban espasmos por sus cáscaras. El visor despejó las lecturas y se fijó en su aliada.
Síocháin nadó hacia adelante, las vísceras de la colmena flotaban suavemente en el océano desde las cuchillas finas que salían de su caparazón. "Dormiste días".
Sloane frunció el ceño en confusión. "Recuerdo la ola de la Pirámide. La caída... Sueños. ¿Estás bien?".
"Fue como dijiste: la colmena nos encontró", dijo Síocháin mientras retraía sus cuchillas.
Sloane abrazó a la espectro contra su traje potente por un rato. "Pequeña asesina... no les diste nada de tregua".
Síocháin emitió un pitido. "La ola de la Pirámide recorrió todo Titán, se agitó un poco y se centralizó donde se detuvo la Pirámide. La gravedad se volvió loca, luego el océano. Creo que nos encontramos a algunos kilómetros de donde estábamos cuando comenzó todo esto".
"¿La Pirámide se detuvo? Entonces ahí es a donde tenemos que ir... pero primero necesitamos algo de equipo", dijo Sloane.
Síocháin se le acercó. "Otra cosa. Hay algo ahí afuera haciendo círculos a nuestro alrededor. No es de la colmena. No logro comprender qué es, pero es grande".
"Ah, ¿sí?", dijo Sloane pensando en lo último que le pasó por la mente antes de desmayarse. "No perdamos ni un minuto más para salir de aquí".
***
Sloane subió del océano a una plataforma de la Arcología semisumergida donde había guardado una serie de raciones y municiones desde que los cielos de Titán se oscurecieron. Su traje potente hizo un ruido metálico contra la malla de acero del suelo; esperó a que los ecos desaparecieran antes de tomarse un rato para exhalar en silencio. En ese instante tranquilo, escuchó una voz tenue.
Síocháin entró en su campo de visión. "¿Escuchas eso?".
"Estaba a punto de preguntarte…", dijo Sloane mientras se ponía de pie. Tomó su Primero y Último de un casillero, sujetó la empuñadura y siguió a la voz por un corredor repleto de percebes hacia un laboratorio de investigación con Síocháin detrás.
Por las paredes agrietadas caían fluidos alrededor de filas de monitores muertos. En el vidrio se reflejaban colores prismáticos de una rasgadura de la realidad en el centro del laboratorio... como si se hubiera tallado en otra época y encajado en esta.
Un humano que parecía no haberlas notado se paseaba dentro de la rasgadura... en medio de un espejismo totalmente funcional de la Arcología. Cuando él se giró hacia ellas, la rasgadura convulsionó y avanzó y retrocedió en el tiempo en duraciones y velocidades erráticas. El hombre quedó rasgado de ambas formas en la inexistencia mientras la grieta revoloteaba entre eventos como si fuera un montaje cuatridimensional.
La rasgadura se estabilizó de nuevo y regresó al hombre a su tiempo y existencia normal. Síocháin notó que la insignia en su delantal decía: "Gideon Tepin, NPA, biólogo marino sénior".
Tepin parecía preocupado y alejó la mirada antes de hablar. "Ella está asustada, es por eso que todos lo sentimos. Algo está mal. ¡Nos está mostrando a simple vista lo que viene!". El hombre agitó la mano con enojo en dirección a Sloane. "Es como si lo estuviera gritando en mi mente. Sé que no soy el único que lo escucha".
"Nos eligió a nosotros". Dio un paso adelante y posó la mano sobre el límite entre el antes y el ahora. "Sueño con mis propios recuerdos, pero con diferencias. Pequeños presagios. Naves negras en el cielo".
Sloane se inclinó hacia adelante, con la mano casi tocando la de aquel recuerdo que se presentaba ante sus ojos al otro lado de la rasgadura.
"Intenta advertirnos. Deberíamos evacuar, tenemos que llevarla...".
La rasgadura se volvió a sacudir, se desvaneció, se perdió en el pasar efímero del tiempo y se apagó en la inexistencia. Para siempre.
Sloane dejó caer la mano. Apretaba la mandíbula. "Fíjate si consigues algún registro de la Arcología sobre esto".
***
"Ese biólogo marino… Tepin… ¿Acaso era él una especie de fluctuación temporal guardada? ¿Eso es... posible?", preguntó Sloane.
"Nunca había visto algo así", respondió Síocháin. "La verdad no estoy segura".
Síocháin examinó los informes archivados. "Hay algo con el nombre 'TLev-01'. Es como una ballena psíquica espacial que unos biólogos estaban estudiando en el océano. Nunca obtuvieron las medidas precisas, pero la estimación no puede ser correcta. ¿Más de 150 metros? Los informes dicen que no era de aquí y mencionan muchas visiones que el personal estuvo experimentando… lo que es… ¿extraño? No había muchas especies alienígenas en Sol antes de la Edad de Oro".
"Mientras estuve inconsciente tuve sueños, Síocháin. De otro mundo, de la Pirámide en Titán... de la Torre. Como si yo recordara haber estado ahí en todos esos eventos".
"Bueno, supongo que podría ser una ballena espacial antigua... o que a veces el Viajero les da sueños a las personas. Pero ¿vamos a pasar por alto la explicación obvia de que una ola de la Pirámide te dejó inconsciente?".
"No... pero hemos visto bastantes rarezas como para ignorarlo", dijo Sloane con un suspiro.
"Bueno, entonces lo anoto", contestó Síocháin. "Oye… las lecturas dentro del campo en el que estaba Tepin eran consistentes con los registros atmosféricos de Titán durante el Colapso".
"¿Eso qué significa?", preguntó Sloane mientras miraba el punto donde el espacio y el tiempo se habían torcido. "¿Que él era... real?".
"Ni idea. Solo sé que no era una simulación".
