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Lore
Luz desgarradora
Digan lo que digan, no puedo creer que Holliday haya logrado arreglarlo. No quedaba mucho después de esa explosión nuclear a pequeña escala.
En el momento en el que el colibrí se estrelló, no hubo tiempo. Para reaccionar. Para prepararse. Para pensar. Sin embargo, quedó un instante para sentir una insoportable eternidad breve, en la que todo en el mundo de Marco era dolor. Nada más existía, solo la agonía simple y mordaz que conformaban todo su universo. Y con la misma rapidez, desapareció. Silencio.
El sonido de un chillido motorizado fue lo primero que regresó a él, e interfirió con el pulso del dolor que sentía en la cabeza. Sus ojos se adaptaron lentamente y entrevió el brillo insufrible del sol marciano.
Gradual pero rápidamente, el dolor regresó y sofocó a todo lo demás.
El colibrí junto a él echaba humo, y el escudo del reactor por poco había sufrido daños, pero estaba intacto. Le dio un vistazo a la larga fisura en el piso en donde la moto había caído y había raspado el suelo del paisaje rojizo hasta que pasó por encima de su…
Bajó la mirada a lo que aún estaba unido a la pierna. Rota. Retorcida. Carne. La bilis llegó hasta su garganta y se la pasó con dificultad antes de darse cuenta de que el miembro destrozado era la única fracción de su cuerpo en la que no había dolor.
]]]El sol se enturbia. Plumas del blanco más puro rozan los mundos. De la esperanza nace la agonía y de ella nace la quietud.[[[
La música electromariachi aún salía forzada por los parlantes del colibrí. A Marco le costaba inhalar, y la vibración en su pecho indicaba que tenía un pulmón perforado.
Perforado.
Empezó a respirar de forma irregular y buscó los contenedores de las muestras, empacadas cuidadosa y cautelosamente por los guardianes que sobrevivieron a la incursión en la Pirámide del mundo trono.
Su mirada se detuvo en el contenedor 6010 que reposaba resquebrajado contra un trozo de basalto.
]]]Plasma que se esparce. Apretón espeso, luz que extrae Luz. Solo sombras cálidas.[[[
Por el polvo rojo entre los despojos serpentearon venas negras.
]]]La gloria otorgada sin esfuerzo priva del dolor a quienes son demasiado débiles como para degustarlo.[[[
Se enrollan en el suelo y, donde la carne tocó la tierra, ya habían encontrado la forma de entrar a su extremidad torcida. El vagón del colibrí palpitaba como un corazón y Marco podía sentir el ritmo cantoral en su pierna.
]]]Los mundos ardieron sin restricción. Dulces, aún son cenizas.[[[
Las imágenes invadieron su mente, se expandieron a su boca y sus pulmones, y amenazaron con ahogarlo en dicha. Su pierna deshecha se volteó, tronó y se enderezó, y por donde debía estar el dolor se filtró la euforia.
]]]Un abrazo profundo, silencioso, seguro.[[[
Sacó la pistola de la funda mientras respiraba con dificultad y apuntó al escudo de reactor fracturado.
]]]Tan suave y tranquilo.[[[
Su mente se liberó y, en una insoportable y breve eternidad, respiró por última vez.
]]]Quédate quieto…[[[
Lo que quedaba de Marco apretó el gatillo.
