Classified Item
Bungie has the ability to expose information in the API that, for whatever reason, is not yet ready to be seen. We call these items "classified".
Sometimes classified items eventually are revealed to be real, in-game items. However, they are usually just junk data that made it into the API that isn't intended to be seen.
We include these items in the database solely to provide a complete view of what is in the API files. You should not take the presence of this item as a guarantee of something coming in a future update or attempt to analyze its presence too deeply. Doing so likely will only lead to disappointment.
This item is categorized as classified because:
- It was marked as a dummy item in the API files.
Lore
Capítulo 10
Ana Bray atravesó el patio, con su perro mecánico detrás. "¡Feliz Fiesta de las Almas Perdidas, Eva!".
"¡Ah, Ana, querida!", respondió Eva y le entregó un pequeño paquete. "Me pareció que Archie se merecía festejar el festival con estilo con su propio disfraz este año".
Ana soltó una exclamación suave de sorpresa agradable al descubrir una pequeña capa. "¡Te ves bien, Archie! ¡Siempre supe que tenías alma de cazador!".
Se agachó para asegurarle la capa. En ese mismo instante, un espectro se acercó a toda velocidad desde el hangar, con una gallina iracunda colgada de la carcasa.
La capa de Archie flameó sobre el ojo del espectro. Al perder la visión, el espectro cayó y rodó por el suelo del patio, hasta chocar contra la pila abandonada de dulces bajo el Árbol de madera de Hierro.
El pico de Coronel se soltó con el impacto y empezó a picarle el ojo al espectro mientras evitaba los caramelos.
*****
Se oyeron ladridos mecánicos y, entre los envoltorios de los dulces, Immaru vio un montón de plumas volar junto a él. Progresivamente, el cacareo se desvaneció en la distancia. Immaru se quedó ahí, inmóvil, hasta que sintió la nariz del perro rozarlo suavemente. Solo entonces se atrevió a salir de su escondite.
"¡Ah, mira eso! ¡Archie salvó a ese pequeño espectro de la ira de Coronel! ¡Qué buen cazador!", exclamó una guardiana. Immaru miró estupefacción cómo todos los guardianes en el patio olvidaban de pronto los dulces y dirigían toda su atención al perro.
"Increíble", murmuró con fascinación.