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Grebas Ídolo atávico
"Estamos notificando a los miembros de la escuadra y a los compañeros de vida a medida que identificamos los restos de espectros. Esto nos llevará un buen rato". (Fragmento de reporte de seguridad de la Vanguardia)
LA LUNA // OCÉANO DE LAS TORMENTAS // COMUNIÓN K1 //
Una luz roja inunda la carcasa negra y dorada de Dunya. El ojo monocular azul del pequeño espectro se mueve de arriba a abajo mientras retrocede mientras asimila la presencia de una figura etérea que flota en las alturas.
Aisha y Reed se dan vuelta por el chirrido de alarma de Dunya, con las armas desenfundadas. Pero, mientras levantan la mira hacia la Pesadilla encapuchada y brillante frente a ellos, se dan cuenta de que ninguno de los dos puede dispararle. Aisha es la primera en susurrar interjección debido a lo impactada que está.
"¿Discuten sobre quién de ustedes es tan terrible como yo?", pregunta la Pesadilla de Shayura mientras aparta su mirada carmesí de Dunya. "No permita el cielo que sean tan atroces como su amiga asesina".
Aisha se queda congelada por la confusión, con las manos temblando en la empuñadura de su fusil de explorador. "Shay". Aquella palabra abandona su boca como poco más que un susurro ronco.
La Pesadilla de Shayura flota lentamente hacia Aisha y Reed, y sonríe cuando Dunya se esconde detrás de su guardiana y se teletransporta.
"Primero viene la culpa", canturrea la Pesadilla. "Luego la vergüenza, luego la negación. Conozco muy bien los patrones". Mueve un dedo de un lado a otro, a modo de reproche. "¿Cuánto faltará para que me olviden? ¿Para que encuentren una nueva hechicera de la cual aprovecharse y fingir que yo nunca existí?".
"Sh… Shay… Shay, qué…", Aisha ni siquiera puede hilar una frase. No hasta que siente la presión de la mano metálica de Reed sobre su hombro. Cuando lo mira, su expresión es de determinación, no de miedo. Es entonces que recuerda las instrucciones de Eris, sobre cómo sobrevivir en la Luna si en algún momento las Pesadillas venían a ellos con rostros y voces familiares.
Aisha vuelve la mirada hacia la Pesadilla de Shayura y susurra: "Lo siento".