Exotic Perks
Festín de Luz
Community Research
This is reduced to 0.5% if Golden Gun is the selected Super Ability.
Picking up an Orb of Power with a charged Super Ability grants a Stack of 'Feast of Light'. Maximum of 6 Stacks.
Casting your Super while at 1|2|3|4|5|6 Stacks consumes all Stacks and grants the following benefits:
• 18.2%|36.4%|54.6%|59.7%|64.8%|70% increased Super damage
• Restores ?|?|?|?|?|200 HP
• 100 HP Overshield for 16 seconds if cast at 6 Stacks
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Lore
Escamas devoraestrellas
Un festín en el cielo. Come hasta que se agote la luz de las estrellas y todo quede en la oscuridad. Entonces, el cosmos temblará con tus rugidos.
El fuerte zumbido de una ola en forma de diente de sierra sacudió a Ekris de su sueño. Soltó un alarido, se deslizó del catre y se desplomó en la silla de piloto. Una gran cantidad de datos se transmitía a través de un conjunto de gruesas pantallas de cristal mientras sonaba la alarma. Conectó todos los detalles: fuertes interferencias en los escáneres, mal funcionamiento de la propulsión principal, indicadores de error en los detectores de proximidad. Miró a través de la portilla, un cristal circular de no más de cinco pulgadas de ancho, y vio pasar volutas de partículas azules.
"¿Colisión?", reflexionó.
Una voz gritó detrás de él. "Aún faltan días para el cinturón, aquí no hay nada con qué chocar".
Ekris volteó y vio a su copiloto. Entrecerró los ojos, tratando de recordar el nombre del otro eliksni, pero no se le ocurrió nada. Se sintió mal por ello. Llevaban un tiempo en tránsito y aún no podía recordar su nombre.
"Raksil", dijo el copiloto mientras se enfocaba en las pantallas de los instrumentos. "Pones esa cara cada vez que olvidas mi nombre".
Ekris apartó la mirada con vergüenza. "Extraña coincidencia. Tenía un hermano llamado Raksil".
"Hay muchos hermanos Raksil y pilotos Ekris, si miras lo suficiente", dijo el copiloto.
Ekris no estaba convencido de que eso fuera cierto, pero no era importante.
"El propulsor no funciona", dijo Ekris. "Está atascado en un campo o algo".
"No está atascado", dijo Raksil mientras introducía algunos comandos a través de los controles del tablero para detener la alarma. "Solo vamos lento. Velocidad constante".
"No hay control…", dijo Ekris con nervios. "Si tenemos suerte, en algún momento saldremos".
"Largo camino solo para llegar a Misraaks". Raksil se sentó en el mamparo y suspiró. "¿Todavía crees que es el kell de kells?".
La mente de Ekris zumbaba con una extraña sensación. No recordaba haber compartido eso con su copiloto.
"La mejor oportunidad que he visto", dijo. "Es diferente, nos une de nuevas maneras".
Raksil hizo un clic con su mandíbula. "Ya he oído eso antes".
Ekris agitó su garra despectivamente. "Siempre estás en desacuerdo solo por estar en desacuerdo".
"Quiero liberarte de esta obsesión", respondió Raksil.
Ekris resopló. "Un kell de kells es un símbolo de esperanza para todos los eliksni. ¿Prefieres que vivamos sin eso?".
"Este mito nos divide, hermano", dijo Raksil. "Nos desgarramos intentando llegar a la cima de la montaña. Luego, miramos hacia abajo y vemos que la montaña está hecha de nuestros estandartes rasgados".
Algo inquietaba a la mente de Ekris. ¿Raksil acababa de llamarlo "hermano"?
Raksil continuó. "La única unidad en este camino es la muerte colectiva. El kell de kells está destinado a gobernar solo la Casa del Silencio".
Ekris chasqueó la mandíbula con rabia. "¿Por qué los eliksni soñarían con este kell si el sueño solo nos perjudica?".
"Tal vez no es así", dijo Raksil con una sonrisa diabólica. "Tal vez algo más lo soñó para nosotros. Para mantenernos separados".
Ekris agitó sus garras, se puso en pie y se paseó por la cabaña. "Ya basta. Este viaje te agotó; necesitas dormir más, vete a tu litera". Su mente volvió a inquietarlo. Solo había una cama en la nave. Se tambaleó cuando el mareo se apoderó de sus sentidos. Cuando levantó la vista, estaba solo.
"Has perseguido este sueño durante tanto tiempo que has olvidado que estás dormido", dijo Raksil, con un matiz de luto en su voz; el sonido no provenía de ningún lugar concreto. La consola del piloto estaba en penumbra y en silencio. Las lecturas de los instrumentos se habían ralentizado y no mostraban ninguna advertencia. Ekris se acercó a la mirilla y no vio más que negro con el brillo disperso de las estrellas lejanas.